Punta Cana. Hoy, 26 de noviembre, la República Dominicana rinde homenaje a su mayor tesoro musical: el merengue. Este género, que forma parte intrínseca de la identidad cultural dominicana, fue proclamado como símbolo nacional mediante el decreto presidencial 619-05 del 11 de noviembre de 2005. La fecha se escogió en honor a la primera mención escrita del término «merengue» en el periódico El Oasis en 1854.
El merengue, considerado un reflejo de la idiosincrasia dominicana, ha trascendido fronteras y se ha consolidado como una expresión artística que resalta la alegría y la unidad del pueblo. En 2019, el país logró un Récord Guinness al reunir al mayor número de parejas bailando merengue sincronizadamente, superando a Rusia, que mantenía el título desde 2013.
El periodista Fausto Polanco destaca el significado patriótico de este ritmo caribeño, comparándolo con la bandera nacional:
«Donde quiera que se escuche, la gente sabe que es de la República Dominicana. Los turistas vienen deseosos de conocerlo, y los artistas extranjeros lo interpretan con respeto, pidiendo permiso como una muestra de admiración hacia este legado cultural».
En 2016, la Unesco declaró el merengue como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, reconociendo su papel esencial en la vida cotidiana dominicana. Desde la educación hasta las celebraciones festivas, el merengue une generaciones y culturas.
Interpretado con instrumentos autóctonos como la güira, la tambora y el acordeón, su contagioso ritmo ha conquistado no solo a América Latina, sino al mundo entero, reafirmando a Quisqueya como cuna de esta manifestación artística.
Hoy, más que nunca, el pueblo dominicano celebra con orgullo este legado que es, sin duda, el corazón musical de la nación.