Las oportunidades que genera la Vía Sacra
Recientemente, la ciudad de Higüey recibió con beneplácito la inauguración de la obra más esperada en esta comunidad: la Vía Sacra.
La construcción de la citada vía era una petición de la comunidad cristiana católica desde hacía mucho tiempo. La calle, que ha sido adoquinada y en sus aceras colocadas esquelas de la pasión y muerte de Jesucristo pretende ser un atractivo para fomentar el turismo religioso tanto para nacionales como para visitantes extranjeros.
La Vía Sacra, según se describe es de estructura de la arquitectura moderna con la histórica y cinco veces centenaria Iglesia San Dionisio, lugar donde, según la tradición, la Virgen de La Altagracia hizo su aparición.
El sueño de los higueyanos era tener esta Vía Sacra, cuya idea se había concebido en el 1954, durante el proceso de la edificación de la Basílica, bajo el mandato de Monseñor Ricardo Pittini, Arzobispo de Santo Domingo.
El mayor impulso de la construccion lo dio Mons. Eliseo Pérez Sánchez. La Basílica inaugurada en 1971, es el hoigar de la venerada imagen de la Virgen de la Altagracia, una zona de peregrinación de los devotos cristianos católicos pero estaba pendiente la construcción de la referida Vía Sacra, obra alcanzada el pasado 13 de septiembre.
Ahora, el reto es lograr que cada visitante que llegue al destino turístico Bávaro Punta Cana tenga la opción de poder entrar en contacto con esta parte representativa de nuestra cultura religiosa. De igual manera, la creación de la Vía Sacra debe significar también para las autoridades un espacio al que hay que dedicar atención para mantenerlo en condiciones óptimas, conservando su belleza, limpieza y solemnidad, y también como una fuente de ingresos municipales.
De igual manera, la creatividad empresarial debe ponerse de manifiesto para hacer de esta vía algo interesante para el visitante. De eso dependerá que los turistas atraídos por el tema religioso católico tengan en la Vía Sacra una experiencia inolvidable.
