PUNTA CANA. La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud sexual como un estado de bienestar físico, mental y social en relación con la sexualidad, que no se limita a la ausencia de enfermedad, disfunción o incapacidad. La salud sexual requiere un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y de las relaciones sexuales, así como la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras, libres de coacción, discriminación y violencia. Para lograr y mantener la salud sexual, es fundamental que los derechos sexuales de todas las personas sean respetados, protegidos y ejercidos plenamente.
Derechos Humanos y Salud Sexual: Existe un consenso generalizado de que la salud sexual no puede alcanzarse ni mantenerse sin el respeto y la protección de ciertos derechos humanos. Los derechos sexuales son la aplicación de los derechos humanos existentes a la sexualidad y a la salud sexual. Estos derechos protegen el derecho de todas las personas a satisfacer y expresar su sexualidad y a disfrutar de la salud sexual, respetando los derechos de los demás y dentro de un marco de protección contra la discriminación.
Acceso a Métodos Anticonceptivos: Garantizar que todas las personas tengan acceso a métodos anticonceptivos modernos, seguros, confiables y preferidos refuerza varios derechos humanos, incluidos el derecho a la vida y a la libertad, la libertad de opinión y expresión, y el derecho al trabajo y a la educación. Además, reporta importantes beneficios para la salud y otros aspectos de la vida. El uso de anticonceptivos modernos puede proteger la salud de las personas con capacidad de gestar de los riesgos asociados con el embarazo no intencional, especialmente en adolescentes o personas con enfermedades crónicas.
Impacto en la Mortalidad Infantil: El intervalo entre nacimientos también juega un papel crucial en la salud infantil. Cuando el intervalo entre nacimientos es inferior a dos años, la tasa de mortalidad infantil es un 45% mayor que cuando este intervalo es de 2 a 3 años, y un 60% mayor que si el intervalo es aún mayor.
La promoción de la salud sexual y la protección de los derechos sexuales son esenciales para el bienestar general de las personas. Es imperativo que se garantice el acceso a métodos anticonceptivos modernos y se fomente un entorno de respeto y protección de los derechos humanos para lograr una salud sexual óptima. Fuente OMS