Bolivia. El presidente de Bolivia, Luis Arce, emitió ayer un ultimátum a los seguidores de Evo Morales que mantienen bloqueadas las principales rutas del país, advirtiendo con ejercer «facultades constitucionales» para restablecer la normalidad.
Según publicó el medio Infobae, los bloqueos, que llevan 18 días, han dejado al departamento de Cochabamba aislado y han incomunicado casi por completo a Santa Cruz de las capitales principales, afectando severamente la economía y la movilidad nacional.
El mandatario llamó al “levantamiento inmediato de todos los puntos de bloqueo” y mencionó que, de no atender este llamado, el Gobierno, que fue elegido con el respaldo del 55% de los votantes, intervendría para proteger los intereses del pueblo boliviano. Paralelamente, Arce aprobó un decreto para bonificar a los policías en situaciones de riesgo y envió fuerzas adicionales a Cochabamba con el fin de apoyar el restablecimiento del orden.
El conflicto surge en medio de acusaciones judiciales contra Morales por delitos de estupro y trata de personas. El exmandatario ha respondido a las advertencias gubernamentales amenazando con un «levantamiento indígena y militar» si es detenido.
La tensión entre ambos líderes se intensificó tras una denuncia de Morales sobre un supuesto atentado en su contra, cuando su convoy fue atacado en el Trópico de Cochabamba.
La situación refleja el creciente distanciamiento entre Arce y Morales y pone a Bolivia en una encrucijada política, con serias repercusiones para la estabilidad y la seguridad del país.