Algunas personas creen que el sexo debe ser dudar horas, sin embargo, no conocen que el acto sexual normalmente tiene una duración entre 7 y 13 minutos. Según una investigación del ‘Journal of Sexual Medicine’, en la que le preguntaron a 500 parejas sobre sus hábitos y preferencias sexuales, la media de cuanto es lo ideal que debe durar el sexo es de 5,4 minutos, sin contar el coqueteo previo.
Aunque el acto sexual es cuestión de gustos y comunicación en la pareja, con estas posturas y técnicas puede hacer que el sexo dure un poco más.
Hacer ejercicios de Kegel
Un estudio del ‘Science Direct’, demostró que ejercitar y fortalecer los músculos pélvicos ayuda a disfrutar de una vida sexual sana. Los ejercicios de Kegel en las mujeres las favorece para alcanzar más fácil el orgasmo, y en el caso de los hombres los puede ayudar a durar hasta cuatro veces más durante el sexo.
No repita siempre las mismas posturas
Algunos expertos en sexualidad recomiendan variar de posturas a lo largo del acto sexual, pues esto ayuda a descansar y también a estimular otras zonas erógenas femeninas y que la fricción en el pene varíe de intensidad. Diferentes estudios han comprobado que el cambiar de posiciones ayuda a los hombres a aguantar más tiempo.
Masturbarse a menudo
La masturbación ayuda a que las personas aprendan a controlar y conocer sus órganos sexuales. En ese sentido, se recomienda que hombres y mujeres realicen esta práctica a menudo para aprender a frenar o acelerar la llegada del propio c
Apretar el pene
Según el terapeuta sexual y autor de ‘She Comes First’, Ian Kerner, aplicar una presión en el pene puede ayudar a reprimir la eyaculación y, por lo tanto, hacer que el acto sexual duro unos minutos más.
“Hay que aplicar una presión firme con el pulgar y el dedo índice y tratar de enfocar el movimiento sobre la uretra, el tubo que recorre la parte inferior del pene”, explicó Kerner.
No pensar en el orgasmo
Muchas veces durante el acto sexual las personas se enfocan en conseguir un orgasmo y están pensando en ello durante todo el momento. Sin embargo, en algunos casos esto no suele ser beneficioso, por esta razón hay que relajarse, dejarse llevar y esperar que el orgasmo lo sorprenda.
“Si dejamos de ver a los orgasmos como el objetivo final, seremos capaces de frenar el placer y centrarnos en el resto de sensaciones involucradas en el sexo”, le comentó la sexóloga Laura Berman, al medio ‘El Confidencial’.