El aceite de orégano cuenta con propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, analgésicas y antimicrobianas que le proporcionan numerosos beneficios para la salud. Entre los más importantes están:
- Tiene un uso tónico general: nos ayuda a fortalecer y a revitalizar el organismo para mejorar nuestra vitalidad y bienestar.
- Funciona como expectorante: hace que se elimine el moco y las secreciones de nuestro aparato respiratorio, por lo que resulta útil para procesos como la tos o la bronquitis.
- Actúa contra las infecciones: estas pueden ser por bacterias, por hongos, virales o de tipo parasitario.
- Es antiséptico: combate infecciones o gérmenes de las vías respiratorias.
- Funciona como espasmolítico: relaja la musculatura lisa de los aparatos digestivo, respiratorio y urinario.
- Estimula el apetito: prepara el sistema digestivo para la ingestión de alimentos.
- Facilita la digestión: ayuda a dividir los alimentos en los diferentes nutrientes y facilita su absorción.
- Es colerético: estimula la producción de bilis para facilitar la digestión de grasas y la eliminación de toxinas.
- Tiene poder antiinflamatorio: resulta eficaz contra la artritis o los dolores musculares o de cabeza.
- Es diurético: facilita la producción y eliminación de orina, pero también funciona contra la retención de líquidos.
- Mejora el colesterol: reduce los niveles del colesterol malo (LDL) y aumenta los del bueno (HDL).
- Ayuda en las dietas: el carvacrol que contiene favorece la pérdida de peso.
- Bueno para la piel: tiene propiedades cicatrizantes y previene de infecciones en las heridas.
- Sube el ánimo.
- Mejora la salud bucodental: ayuda a prevenir la aparición de caries o gingivitis.
El aceite de orégano también cuenta con propiedades antifúngicas, por lo que también resulta adecuado para la candidiasis (un tipo de infección causada por hongos), ya sea vaginal, cutánea, oral, esofágica o profunda. «Además, no conlleva los efectos secundarios que pueden aparecer con el uso de antibióticos, como la destrucción de la flora intestinal, la permeabilidad del intestino o un aumento del riesgo de la resistencia a los antibióticos», cuentan desde la tienda online de productos naturales El Búho Verde. La coach nutricional Elisa Senra recomienda su uso en su canal de YouTube basándose en su experiencia personal. «El único antifúngico que me ha funcionado«, destaca.
Cómo consumir aceite de orégano
Al ser demasiado fuerte, hay que tener cuidado a la hora de tomar, inhalar o aplicar en la piel el aceite de orégano, ya que puede incluso causar quemaduras. En cualquier caso, se deben diluir dos o tres gotas de este producto en otro aceite esencial, en un líquido (agua o zumo, por ejemplo, para beberlo) o en un plato de comida.
