PUNTA CANA. Como cada cuerpo es diferente, lo que causa vaginitis en unas no es lo que la produce en otra. Sin embargo, en general, cualquier cosa que cambie el equilibrio natural de tu vagina puede causar vaginitis. También las reacciones alérgicas
Otras cosas que pueden causar vaginitis son las reacciones alérgicas o sensibilidad a diferentes productos, materiales o actividades.
Aquí te compartimos algunas maneras de mantener tu vulva y vagina sanas:
No uses tampones ni toallas sanitarias con perfume. Tampoco uses desodorantes vaginales ni productos de “higiene femenina” perfumados.
Si te preocupa el olor de tu vagina, consulta a tu médico.
Si irritan tu piel, no uses productos de baño (como jabones o baños de espuma) o productos de lavandería con perfume, ni papel higiénico de colores o con perfume.
No te hagas duchas vaginales, pues las duchas matan los organismos buenos y saludables que mantienen tu equilibrio natural. Además, si ya tienes una infección vaginal, hacerte duchas vaginales puede empeorarla.
La vagina se limpia sola, no es necesario que limpies tu vagina por dentro.
La mejor manera de limpiar tus genitales, es lavar tu vulva con un jabón suave y sin perfume, o simplemente con agua limpia. La vaginitis no tiene nada que ver con qué tan limpix estés, por lo que ducharse o hacerse duchas vaginales no la cura.
La vaginitis se desarrolla más rápido cuando tu vulva está húmeda.
Asegúrate de mantener tus genitales lo más secos posible. Cuando uses trajes de baño, no te los dejes puestos mientras están mojados. Tampoco te dejes puesta ropa húmeda ni uses pantalones que sean muy apretados e incómodos.
Cuando te duches, lava tu vulva con un jabón suave y agua. Después, seca bien tus genitales.
Usa ropa interior de algodón o que tenga la parte que cubre los genitales de algodón. Esto hace que tus genitales tengan mejor ventilación y ayuda a mantenerlos secos. Cámbiate la ropa interior todos los días.
Cámbiate los tampones y las toallas sanitarias cada 4 a 8 horas.
Lava tu copa menstrual y tus juguetes sexuales cuidadosamente, siguiendo las instrucciones.
Límpiate bien después de hacer caca para evitar que los gérmenes de tu ano se pasen a tu vulva, pues esto puede causar una infección. Si tienes sexo anal, asegúrate de lavar muy bien cualquier cosa que haya entrado en tu ano (los dedos, juguetes sexuales o el pene) antes de que toque tu vagina (o usa un condón nuevo).
Ciertos tipos de lubricantes y espermicidas pueden causar irritación en algunas personas. Si esto te sucede, deja de usarlos o prueba una marca diferente. Si tienes alergia al látex, puedes usar condones de poliuretano, poliisopreno o nitrilo (están hechos de plásticos suaves y no tienen látex).
Conoce bien tus genitales. Mira tu vulva en un espejo y aprende a reconocer tus olores y tu flujo vaginal normales. Es normal que tu flujo vaginal cambie un poco durante tu ciclo menstrual. Cuando conoces bien tu cuerpo es muy fácil reconocer si algo anda mal y obtener tratamiento lo más pronto posible -en caso de que lo necesites-.
Fuente: Planed Parentood