El Gobierno argentino llevó a cabo una operación clave el pasado 18 de diciembre al adquirir cerca de USD 1.500 millones del Banco Central, en línea con los objetivos de acumulación de reservas establecidos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la meta de mantener la base monetaria amplia (BMA) por debajo de los $ 47,7 billones.
La transacción se realizó mediante un aumento en los depósitos en dólares del Tesoro en el Banco Central, mientras que sus depósitos en pesos alcanzaron el nivel más bajo desde mayo. Estas medidas permitieron al Tesoro acercarse a las metas de reservas netas internacionales, quedando apenas USD 285 millones por debajo del objetivo de USD 9.700 millones pactado para el cierre de 2024.
Además, esta estrategia ayudó a contener el precio del dólar en un contexto de alta volatilidad, aunque el dólar blue cerró la semana pasada en $ 1.200 tras un aumento de 25 pesos.
En paralelo, el Gobierno ya había asegurado los dólares necesarios para afrontar vencimientos inmediatos, como el pago de bonos de capital e intereses previstos para enero de 2025. Al 20 de diciembre, los depósitos en dólares del Tesoro en el Banco Central alcanzaron su nivel más alto del año, sumando USD 5.830 millones, equivalente al 82% de los vencimientos con el sector privado programados para 2025.
De cara a 2025, Argentina enfrentará compromisos financieros de USD 22.000 millones, distribuidos entre organismos multilaterales, bonistas, importadores y provincias. La operación realizada la semana pasada se considera un paso crucial para estabilizar la economía en un escenario desafiante.
Fuente: Infobae