Un innovador proyecto llamado Life’s Echo utiliza inteligencia artificial para «revivir» a personas fallecidas mediante chatbots que imitan su voz y personalidad. Este avance tecnológico permite a los familiares interactuar con una versión digital de sus seres queridos, creada a partir de entrevistas realizadas en vida por otra IA llamada Sarah.
Durante estas entrevistas, se recopilan recuerdos, anécdotas y datos personales, que luego son procesados para generar un modelo que reproduce la voz y el estilo conversacional del fallecido. Los familiares pueden, por ejemplo, hacer preguntas sobre recetas favoritas o momentos importantes y recibir respuestas que evocan la esencia de la persona.
El proyecto busca ofrecer consuelo emocional y mantener viva la memoria de quienes han partido. Aunque plantea dilemas éticos, iniciativas similares como HereAfter AI o Eterni.me están ganando popularidad como herramientas para preservar legados digitales.
Además, Life’s Echo garantiza la protección de datos mediante cifrado, asegurando que solo usuarios autorizados puedan acceder a la información. Este avance marca un nuevo capítulo en la relación entre la tecnología y el duelo humano.
Fuente: Infobae