DPA Europa Press
Madrid. La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha resaltado este jueves que «decenas de millones de personas» están «potencialmente en peligro mortal» a causa de la ofensiva militar de Rusia y ha resaltado que la invasión ha abierto «un nuevo y peligroso capítulo» en la historia del mundo.
«Estoy profundamente preocupada por la posibilidad de que el actual recrudecimiento de las operaciones militares incremente el peligro al que hacen frente (las personas que siguen en el país», ha dicho. «Miles de personas, incluidos ancianos, embarazadas, niños y personas con discapacidad se ven forzados a reunirse en refugios subterráneos y estaciones de metro para escapar de las explosiones», ha lamentado.
«Muchas personas en situaciones de vulnerabilidad son separadas de sus familias y atrapadas. Mi personal en Ucrania ha sido contactado por muchos grupos que temen ser perseguidos si las tropas rusas avanzan, incluidos miembros de la comunidad tártara de Crimea en Ucrania, así como destacados activistas y periodistas», ha detallado.
Así, ha recalcado que la ofensiva «está generando un impacto masivo sobre los Derechos Humanos de millones de personas en Ucrania» y ha advertido de que «los riesgos aumentados de las armas nucleares subrayan la gravedad de los riesgos para toda la humanidad».
Bachelet ha denunciado además los bombardeos contra diversas ciudades ucranianas, entre ellas la capital, Kiev, y ha resaltado que «la localidad de Volonovaja, en la región de Donetsk, ha quedado casi completamente destruida por los ataques con artillería, por lo que los residentes que quedan allí se esconden en sótanos».
En este sentido, ha confirmado hasta ahora un total de 752 víctimas civiles, incluidos 227 muertos, entre ellos 15 niños. «Debo enfatizar que las cifras reales serán mucho más elevadas, dado que muchas otras víctimas están a la espera de confirmación y la información en algunas zonas de intensas hostilidades sufre retrasos», ha explicado.
«Una miembro de la unidad de supervisión de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) en Ucrania murió la pasada noche en Járkov mientras obtenía suministros para su familia. Lamentamos todas las muertes que han ocurrido», ha dicho, antes de reseñar que «la mayoría de las víctimas civiles han estado causadas por el uso de artillería pesadas, lanzacohetes y bombardeos contra zonas pobladas».
Bachelet ha indicado además que hay «informes preocupantes» sobre el uso de municiones de racimo y ha agregado que «se ha causado un daño masivo a edificios residenciales». «El uso de armas con efectos en un gran área tiene el riesgo de ser inherentemente indiscriminado y pido el fin de su uso», ha reseñado.
En esta línea, ha denunciado «daños sustanciales» a instalaciones civiles como hospitales, escuelas y guarderías, antes de incidir en que «infraestructura civil ha sufrido grandes daños», lo que ha supuesto una suspensión de la entrega de servicios y suministros, incluida el agua, la electricidad y los servicios médicos. «El 26 de febrero, tropas rusas cerca de Jersón habrían disparado contra una ambulancia que trasladaba a víctimas gravemente heridas. El conductor murió y un paramédico resultó herido», ha relatado.
Por otra parte, ha señalado que más de dos millones de personas «se han visto forzadas a huir de sus hogares», incluido un millón que ha escapado del país. «El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) calcula que hasta cuatro millones de personas podrían tener que abandonar el país en las próximas semanas si continúa el conflicto».
«Felicito la acogida que han recibido los ucranianos que han huido del país», ha destacado, si bien ha resaltado que «hay indicaciones alarmantes sobre una discriminación contra personas africanas y asiáticas en su huida». «Mi oficina analizará esta situación con atención», ha prometido.
Por ello, Bachelet ha pedido «una solución inmediata al conflicto a través de medios pacíficos» y ha reiterado que «los estados deben cumplir el Derecho Internacional y los principios centrales que protegen la vida y la dignidad humana». «Es imperativo que se permita un acceso total para la entrega de ayuda humanitaria a los civiles en todo el país», ha explicado.
Bachelet ha resaltado además que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) iniciará el lunes vistas relacionadas con el conflicto y que el Tribunal Penal Internacional (TPI) ha anunciado que iniciará procedimientos para activar investigaciones sobre la situación en el país europeo.
«Mi oficina ha supervisado de forma extensa y consistente durante ocho años la situación de los Derechos Humanos en Ucrania, con un foco particular en las regiones de Donbás sumidas en conflicto, así como la República Autónoma de Crimea y la ciudad de Sebastopol, ocupadas por Rusia desde 2014», ha recordado.
«Nuestros observadores de los Derechos Humanos seguirán operando en todo el país con toda su capacidad. Creo que esta crisis demuestra la importancia vital de nuestro objetivo de supervisar e informar en Ucrania y muchos otros países», ha defendido, antes de trasladar su apoyo «a todas las personas que sufren un miedo insoportable, dolor y privaciones a causa de la destrucción insensata de la guerra».