AFP
Ucrania. “Alrededor de 1,300 militares” ucranianos murieron desde el inicio de la invasión rusa el 24 de febrero, afirmó el sábado el presidente ucraniano Volodimir Zelenski, durante una rueda de prensa en Kiev.
Es la primera vez desde el inicio del conflicto que las autoridades ucranianas dan un balance de bajas. El 2 de marzo, el ejército ruso afirmó haber perdido, por su parte, a 500 soldados, una cifra que no actualizó desde entonces.
Rodean capital de Ucrania
Las fuerzas rusas se apostaron alrededor de Kiev este sábado y bombardearon áreas civiles de otras ciudades ucranianas, incluyendo un hospital de Mikolaiv, y estrecharon el cerco de Mariúpol, una ciudad portuaria del sureste asediada desde hace dos semanas.
Los bombardeos rusos destrozaron el aeropuerto de Vasylkiv el sábado por la mañana, a unos 40 km al sur de Kiev, donde un depósito de gasolina se incendió, según el alcalde de esa ciudad.
Los suburbios del noroeste de la capital, como Irpin y Busha, llevan días bajo las bombas rusas, mientras los blindados de Moscú avanzan por el eje del noreste.
El consejero de la presidencia ucraniana Mikhailo Podolyak afirmó que la capital “está sitiada”.
El ejército ucraniano indicó que las tropas rusas centran sus esfuerzos en la capital, en Mariúpol y en varias localidades en el centro como Krivói Rog, Kremenchuk, Nikopol o Zaporiyia. Medios locales indicaron también la activación de las sirenas antiaéreas el sábado en Kiev, Odesa, Dnipró y Járkov.
- Situación “casi desesperada” en Mariúpol -Después de doce días de asedio, gran parte de la atención se centra en Mariúpol, en el mar de Azov, cuyos habitantes están incomunicados, sin agua, gas o electricidad e incluso se pelean para conseguir alimentos. Es una situación “casi desesperada”, advirtió Médicos Sin Fronteras (MSF).
“El enemigo todavía bloquea Mariúpol”, dijo el viernes por la noche el presidente ucraniano Volodimir Zelenski. “Las tropas rusas no han dejado entrar nuestra ayuda a la ciudad”, criticó, prometiendo que probará nuevamente hacer llegar suministros a la ciudad.
“Mariúpol asediada es actualmente la peor catástrofe humanitaria del planeta. 1.582 civiles muertos en doce días, enterrados en fosas comunes como ésta”, dijo el jefe de la diplomacia de Ucrania, Dmytro Kuleba, en un tuit acompañado por la foto de una zanja con cadáveres.
El Ministerio ucraniano de Relaciones Exteriores afirmó este sábado que las fuerzas rusas bombardearon la mezquita del sultán Solimán de Mariúpol, donde había 80 civiles refugiados, pero uno de los implicados en las operaciones de evacuación de esa ciudad lo desmintió poco después.
En declaraciones a la cadena turca HaberTürk, Ismail Hacioglu, presidente de la asociación de esa mezquita, explicó que el barrio donde se encuentra la mezquita estaba siendo atacado pero que el templo no fue alcanzado por el fuego.
“Los rusos bombardean la zona […] que se encuentra a 2 km de la mezquita, y una bomba cayó a unos 700 metros de la mezquita”, había indicado previamente Hacioglu en Instagram.
Además, el responsable precisó a HaberTürk que dentro de la mezquita había treinta ciudadanos turcos, “incluyendo niños” y que su asociación había intentado evacuar a ciudadanos turcos en cuatro ocasiones, sin éxito. “Los rusos no nos dejaron cruzar las barreras”, indicó, y agregó que prevén “intentarlo por quinta vez”.
El gobierno turco rechazó reaccionar el sábado a las informaciones sobre el bombardeo de la mezquita.
Para este sábado se previó otro intento de evacuación de civiles de esa ciudad a través de un corredor humanitario hasta Zaporiyia, a 200 km al noreste, dijo el gobierno ucraniano.