DPA Europa Press
Madrid. El primer ministro de Países Bajos, Mark Rutte, ha pedido disculpas este jueves a Indonesia por la «sistemática», «generalizada» y «extrema» violencia perpetrada por el Ejército neerlandés contra la población civil, durante la guerra de independencia del país asiático (1945-1949).
«Por la sistemática y generalizada extrema violencia del lado holandés en esos años y la constante mirada hacia otro lado por parte de los gobiernos anteriores, me disculpo profundamente con el pueblo de Indonesia en nombre del Gobierno», ha expresado el primer ministro neerlandés, informa la cadena televisión NOS.
Las disculpas de Rutte se dan tras la publicación este jueves de un informe elaborado por tres institutos de investigación sobre el papel de Países Bajos en aquellos años cuando ejercía como potencia colonial de las conocidas por entonces como Indias Orientales Neerlandesas.
Las conclusiones, reconoce, son «duras» y han de ser «confrontadas». El Gobierno, ha remarcado, asume toda la responsabilidad por el «fracaso colectivo», después de que este estudio haya revelado que los líderes políticos y militares de la metrópoli toleraron los crímenes de guerra que se cometieron.
A pesar de que los informes sobre violencia y masacres de aquellos años han existido siempre, el Estado neerlandés siempre mantuvo que fueron episodios aislados y no ha sido finalmente hasta 2017 cuando el Gobierno encargó una investigación formal al respecto.
Los encargados de llevar a cabo este trabajo son Real Instituto Neerlandés de Estudios del Sureste Asiático y el Caribe (KITLV), el Instituto Neerlandés de Historia Militar (NIMH) y el Instituto NIOD de Estudios de Guerra, Holocausto y Genocidio.
Se estima que en aquella guerra -tras casi 350 años de domino colonial– murieron más de 100.000 indonesios y unos 5.000 soldados neerlandeses. Uno de los jefes de la investigación, Gert Oostindie, ha relatado que se produjeron de manera sistemática «torturas, malos tratos durante los interrogatorios, violaciones, ejecuciones extrajudiciales y centenares de miles de pueblos arrasados».
