El País
España. El avance imparable de la lava por el valle de Aridane sigue engullendo hogares, caminos y todo lo que encuentra a su paso, como han mostrado las imágenes satélite.
El panorama es desolador: más de 200 hectáreas arrasadas y cerca de 600 edificios destruidos. Quedan 2,000 metros hasta el mar y en su camino hay cientos de casas más.
La velocidad del avance ha sido desigual durante la semana. La lava cubrió 150 hectáreas en las primeras 42 horas (3 por hora), para avanzar luego apenas 10 en las siguientes 36 horas (0,3 por hora). El jueves el ritmo volvió a aumentar, ganando 26 hectáreas en 25 horas (1 por hora). Pero de jueves a sábado por la mañana, momento de la última imagen, el avance ha sido de 20 hectáreas en 36 horas (0,5 por hora).
La colada ha engullido ya unos 570 edificios, según la última imagen satélite del jueves. Según el catastro, la mayoría son casas, garajes y otras construcciones residenciales, aunque también 70 edificios de uso industrial, comercial o agrícola.
Otras 1650 están intactas pero en riesgo, la mayoría en dirección al mar. Son las edificaciones que se encuentran sobre las trayectorias posibles de las lenguas de lava, según las predicciones probabilísticas de la Universidad de la Laguna.
