Patty de la Cruz
PUNTA CANA. El consultor en legislación y gestión municipal, Pedro Luis Gago Clérigo, dice que está de acuerdo con la puesta en marcha de una Oficina de Planeamiento Urbano regentado por la Junta Municipal de Verón-Punta Cana, puesto que los impuestos cobrados por los suelos deben ser reutilizados en la misma demarcación.
“Cuando un Ayuntamiento consigue una licencia de construcción y cobra dicho impuesto, esos ingresos deben destinarse a mejorar el entorno urbano donde se realizará la construcción”, manifestó Gago.
Su apoyo a esta iniciativa está alineada con su compromiso hacia la descentralización de servicios públicos y competencias a nivel local, con el fin de asegurar un desarrollo más próximo y eficaz para los ciudadanos.
Gago resalta que cuando una persona se muda a un determinado lugar exigirá áreas verdes, alumbrado y un entorno más limpio con la recogida de basura. “Hay personas que piensan que los ingresos que proceden de la creación urbanística, de uso de suelo y ordenamiento del territorio y construcción se lo pueden gastar en cualquier cosa”, subrayó el experto en asuntos municipales.
Gago dijo que no tiene sentido que se cobre el uso de cambio de suelo y construcción en el Macao para que luego esos ingresos sean gastados en el Ayuntamiento de Higüey. “Lo correcto es que esos impuestos sean devueltos a Macao y sean reinvertidos en mejorar las infraestructuras de la zona”, indicó el experto municipalista.
Explicó que los recursos económicos que se recaudan deben ser destinados e ingresados en un fondo municipal e invertidos en el territorio que los generó, para realizar mejoras en obras de infraestructuras.
Dijo que la ley de Ordenamiento Territorial creó los ingresos para mejorar el entorno donde se va a mejorar el entorno donde se va a mejorar las condiciones que era una zona rustica. Los ayuntamientos cobran porque cuando se hará una obra de construcción tendrá una repercusión en todo el entorno que habrá que modificar.
Conflicto
Actualmente, la Junta Municipal de Verón-Punta Cana y la Alcaldía de Higüey se encuentran en disputa sobre una Oficina de Planeamiento Urbano, lo que implica que a partir de su creación el dinero de los impuestos cobrados en esta localidad turística sea invertido en esta demarcación.
La Junta Municipal de Verón-Punta Cana, con el director distrital Ramón Ramírez a la cabeza, basa sus argumentos de instalar una Oficina de Planeamiento Urbano en lo que establece el artículo 24 de la Ley 368-22, de Ordenamiento Territorial, Asentamientos Humanos y Uso de Suelos.
Esta legislación dispone que las demarcaciones con más de 15,000 habitantes pueden desarrollar sus propias acciones en materia de planeamiento urbano con el apoyo técnico del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo.
Por esta razón, Gago resaltó que tanto el Distrito Municipal Otra Banda como Verón-Punta Cana pueden habilitar y operar una Oficina de Planeamiento Urbano, porque ambos tienen más de 15 mil habitantes.
En el caso de Lagunas de Nisibón, que es también un distrito municipal, Gago dijo que debe seguir trabajando bajo la jurisdicción de la Oficina de Planeamiento Urbano del Ayuntamiento de Higüey, debido a que aún no cumple con el requisito de los 15 mil habitantes, según plantea el aludido artículo 24 de la Ley 368-22.