El 5 de julio está cerca, y eso conlleva la celebración de las próximas elecciones presidenciales y congresuales en medio de una pandemia que ha paralizado al mundo, incluyendo a la República Dominicana.
Las elecciones del 5 de julio enfrentarán a un Partido de la Liberación Dominicana (PLD) dividido, a un Partido Revolucionario Moderno (PRM) como el baluarte del cambio y a una Fuerza del Pueblo como comodín decisivo en una posible segunda vuelta. No obstante, todos ellos también tendrán que luchar en contra del miedo que ha dejado en la población el covid-19, una pandemia que ha matado a más de 500 mil personas alrededor del mundo.
La Junta Central Electoral (JCE) se consagra, una vez más, como ente regulador de las próximas elecciones. Julio Cesar Castaños Guzmán, presidente de la JCE lidera un pleno que se enfrentará a uno de los mayores retos en los últimos años debido a que tendrá que luchar en contra de dos frentes para que las elecciones tengan éxito.
PROTOCOLOS SANITARIOS
La JCE tendrá que velar para que todos sus protocolos sanitarios se cumplan durante el proceso de la votación y limpiar su imagen como un ente regulador íntegro, que se vio dañada en las pasadas elecciones municipales debido al fallo del multimillonario y prometedor sistema automatizado impuesto por el organismo.
Queda por verse si el covid-19 logrará mermar la cantidad de votos el 5 de julio, en una nación en donde la enfermedad está en auge con más de 30,000 infectados y 726 muertes. En el año 2016 había un total de 6 millones 765 mil 245 votantes, de los cuales solo ejercieron su deber 4 millones 708 mil 746 de un total de 10 millones de habitantes.
Es decir, en las elecciones del 2016, solo votó el 47.7% de la población dominicana y el 69.6% del padrón electoral. Queda por ver si los candidatos presidenciales y congresuales tendrán el suficiente empuje para llevar a más votantes que en el 2016 y si la Junta Central Electoral logrará que los ciudadanos sientan la seguridad de no infectarse del coronavirus durante el proceso.
La JCE tendrá que velar porque se lleguen a cumplir los protocolos en cada uno de los colegios electorales. Y es que los recintos electorales serán desinfectados y para ello la Junta Central Electoral, solicitará la colaboración de las autoridades correspondientes, los propietarios y administradores de los mismos.
Además, los electores entrarán a los recintos organizados en sus respectivas filas, provistos de mascarillas y guardando una distancia de dos metros, entre unos y otros.
Los facilitadores y los segundos vocales de cada colegio, guardando el distanciamiento social, organizarán las filas en los espacios abiertos del recinto o en la entrada de estos, auxiliados por la Policía Militar Electoral, para evitar la aglomeración de personas en la entrada de cada colegio electoral. Entre otros lineamientos.
CANDIDATOS ANTE EL COVID-19
Faltan tres días para las elecciones y los candidatos presidenciales viven en una ardua batalla electoral tirados a las calles en plena pandemia. Gonzalo Castillo es el candidato presidencial del PLD, Luis Abinader lidera el PRM y Leonel Fernández es el candidato de la recién nacida Fuerza del Pueblo. De los tres, solo uno repite candidatura presidencial desde el 2016, Luis Abinader.
En las pasadas elecciones presidenciales, Abinader solo logró un 34.98% de los votos, perdiendo ante el actual y reelecto presidente de la República Danilo Medina, quien contó con un 61.74% de los votos y una gran aceptación por la sociedad dominicana. Hoy día, según varias encuestas, el panorama es distinto y el favorito es Abinader, por encima de Gonzalo Castillo y el veterano Leonel Fernández.
Aparentemente Gonzalo Castillo no termina de prender y Danilo Medina ya tiene una semana en las calles intentando buscar ese 20% que le hace falta a su denominado “penco de candidato” para superar al partido opositor. Por otro lado, y de forma menos avasallante, está Leonel Fernández, quien dejó atrás su reino peledeista para crear un nuevo frente, la Fuerza del Pueblo.
Fernández está claro que juega un rol importante en las próximas elecciones. Según el entiende habrá una segunda vuelta, y sus fieles seguidores representarán ese comodín decisivo que decidirá al próximo presidente de la República Dominicana. Durante todo el proceso, solo Luis Abinader ha estado infectado por coronavirus.