Justin Montilla es un niño de cinco años que vive en el paraje Las Tres Piezas El Buen, ubicado a siete kilómetros del Distrito Municipal Turístico Verón-Punta Cana. A pesar de que ya asiste a la escuela, todavía no es conocedor de las nuevas tecnologías.
Según su tío, Soriano Donastorg, Justin apenas está aprendiendo a utilizar los celulares inteligentes, y todavía no sabe hacer uso de una computadora ni una tablets. Y es que a él le gusta el trabajo del campo. Justin ayuda con las vacas y los becerros de su familia, así se ha criado en este apartado paraje de la provincia La Altagracia. Asiste a la pequeña escuela básica ubicada en esa localidad.
Allí recibe docencia junto a unos 40 niños más, repartidos en dos tandas. Esa escuela cuenta solamente con un profesor, un aula, un baño y un amplio patio con algunos juegos que han sido donados por instituciones privadas y fundaciones que se interesan en el bienestar de los niños.
La comunidad de Las Tres Piezas no cuenta con los servicios básicos que necesitan los seres humanos para vivir con un mínimo de dignidad, como la luz y agua, además de que los caminos que conducen hacia allá están prácticamente intransitables.
En este paraje parece utopía la idea que el Gobierno a través del Ministerio de Educación (Minerd) los equipe de computadoras y tablets, esto porque sin energía eléctrica y servicios de internet resultaría algo inalcanzable para ellos.
La única forma de producir energía eléctrica en esa comunidad tan apartada de la civilización es con plantas a base de combustible y con paneles solares, y esto solo lo poseen dos o tres casas.
OTRAS OPCIONES
En la República Dominicana hay comunidades tan lejanas que es muy probable que no sean beneficiadas con esta iniciativa de Abinader y que no cuentan con las condiciones para llevar un año escolar a distancia como ha propuesto el Minerd. Ante esta realidad el ministro de Educación, Rafael Fulcar, se reunió nueva vez tanto con el presidente Abinader como con la vice presidenta Raquel Pena, para tratar el tema de la conectividad de todas las comunidades.
Tras ese encuentro Fulcar señaló que esperan que ya para la fecha de inicio del año escolar (02 de noviembre) se pueda lograr la conectividad en todas las comunidades. Otro tema al que se refirió fue el hecho de que la adquisición de los equipos (laptops y tablets) es un tema que lleva más tiempo y será paulatino.
Según Fulcar el retraso en la entrega de esos equipos pudiera deberse a que hay que hacer un proceso de licitación internacional y adquisición, para luego transportarlos al país, después insertarle contenidos tecnológicos, contenidos virtuales y luego distribuirlos a los estudiantes. Así fue como el actual ministro de Educación indicó que se había determinado que los alumnos que hayan adquirido equipos tecnológicos podían comenzar las clases con internet.
los que no, seguirán las clases a través de la radio, televisión y material impreso. Esta opción sería viable en comunidades que cuenten con energía eléctrica y equipos tales como televisión y radio. Pero pese a ello hay lugares tan apartados, como Las Tres Piezas donde esto no es posible. Hay comunidades en las que las personas viven por debajo de la línea de pobreza y en sus casas no cuentan ni siquiera con radio de los que usan baterías.
POBREZA
Según el Mapa de Desarrollo Humano de la República Dominicana del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) “las provincias se clasifican, de acuerdo a su nivel de Índice de Desarrollo Humano (IDH), en cuatro categorías: desarrollo humano alto, desarrollo humano medio alto, desarrollo humano medio bajo y desarrollo humano bajo”.
El Índice de desarrollo humano (IDH) es un indicador nacido de la mano del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) que mide el nivel de desarrollo de cada país atendiendo a variables como la esperanza de vida, la educación o el ingreso per cápita.
En el caso de la provincia La Altagracia en el Mapa de Desarrollo Humano de la República Dominicana del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) actualizado en 2016 su nivel de Índice de Desarrollo Humano es medio bajo.
Este estudio también señala que las provincias con menores niveles de desarrollo humano (desarrollo humano bajo y medio bajo) concentran un tercio de la población total del país y el 46.3% de la población que vive en la zona rural.
Refiere que las provincias con desarrollo humano bajo tienen mayor porcentaje de población rural, en tanto que en las provincias de desarrollo humano medio alto y alto menos del 25% de la población vive en la zona rural.
Esto refleja las desventajas que tiene la población rural, que sufre mayores privaciones y por ende tiene menos oportunidades de lograr una vida larga y saludable, educación, empleo, participación y alcanzar así mejorar su calidad de vida.
Además, evidencia la necesidad de priorizar intervenciones en salud, educación, infraestructura de servicios básicos y de medios de vida en la zona rural del país, y específicamente en aquellas de menor nivel de desarrollo humano.
En las provincias con IDH medio bajo vive el 28.8% de la población del país; en estas provincias el 34.9% vive en la zona rural. Según el Boletín de Estadísticas Oficiales de Pobreza Monetaria del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPYD) y la Oficina Nacional de Estadística (ONE) Para septiembre del 2016 en el país habían 3millones 176mil 750 personas pobres, y 7millones 401mil 309 personas no pobres, para una población de un total de 10millones 578 mil 059 personas.
Según los resultados de la encuesta ENHOGAR 2016, en cuanto a la tenencia de bienes y servicios de acceso a las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) en los hogares, los resultados indican que el teléfono celular es el dispositivo TIC más común en los hogares de la República Dominicana, pues un 89.0% lo poseen y el acceso a la Internet uno de los menos frecuentes con un 25.2%.