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Estados Unidos. LeBron James anotó 38 puntos, anotó otro triple-doble y despertó recuerdos de su tiempo en Cleveland, al llevar a Los Angeles Lakers a una victoria el lunes 131-120 sobre los Cavaliers, que tuvieron una horrible noche defensiva.
Fue la única visita de James a casa esta temporada, aparte del Juego de Estrellas del mes pasado, y la estrella del cercano Akron emocionó a los fanáticos que le dieron una calurosa bienvenida. James jugó 11 temporadas en dos temporadas con los Cavs, tratando de volver a los playoffs por primera vez desde que se fue en 2018.
James agregó 10 rebotes y 12 asistencias para el triple-doble número 105 de su carrera y el sexto esta temporada. Está tratando de mantener a los Lakers en la postemporada en lo que hasta ahora ha sido una temporada decepcionante.
Russell Westbrook y DJ Augustin agregaron 20 puntos cada uno para los Lakers, que llegaron empatados en el noveno lugar de la Conferencia Oeste.
Darius Garland anotó 29 y agregó 16 asistencias para Cleveland, que llegó liderando a Toronto por un juego por el puesto número 6 en el Este. Los Cavs jugarán contra los Raptors el jueves por la noche.
James anotó cinco puntos cuando los Lakers abrieron el último cuarto con una racha de 12-2 para subir por nueve. Cleveland todavía estaba a una distancia sorprendente cuando James, como lo ha hecho tantas veces con tantos equipos antes, alejó a los Cavs con una clavada y un tiro en salto en los últimos 2:34.
Después de su entrevista televisiva posterior al juego, James se fue golpeando las manos con los fanáticos en su camino hacia el vestuario.
James mejoró a 17-1 en juegos contra los Cavs. Ha promediado 29,6 puntos contra Cleveland, su mayor cantidad contra cualquier oponente.
El cuatro veces MVP y campeón fue aclamado desde el momento en que corrió a la cancha para los calentamientos. Recibió una gran ovación durante las presentaciones de los jugadores y nuevamente en un tiempo muerto en el primer cuarto cuando los Cavs lo saludaron por convertirse en el segundo anotador en la historia de la liga.
James saludó, se dio unas palmaditas en el corazón, juntó las manos como si rezara y se inclinó hacia los fanáticos de Cleveland, que presenciaron algunas imágenes familiares: su lanzamiento de tiza antes del juego, los desvanecimientos característicos y uno de esos impresionantes volcados que solo él puede hacer.
James llegó a casa segundo en la lista de anotadores después de superar a Karl Malone el sábado por la noche en Washington con una actuación de 38 puntos. Hubo especulaciones de que se sentaría contra los Wizards para descansar su dolorida rodilla izquierda, para poder colocarse detrás de Kareem Abdul-Jabbar en su último regreso a casa.
Pero a pesar de las dificultades de los Lakers, James sigue dedicado y comprometido, incluso a la edad de 37 años.
El entrenador Frank Vogel encuentra eso inspirador.