Paolo Napoleón Banchero empieza a escribir las primeras líneas de su historia en la NBA a través del Orlando Magic, en los primeros partidos demostró sus grandes habilidades. Podrían destacarse muchos números, pero sus 159 puntos convertidos en siete juegos lo colocan como el joven anotador más prolífico de la historia NBA, por encima de Kevin Durant (152) y Luka Doncic (143).
«Planeo traer todo lo que tengo a Orlando: una mentalidad ganadora, trabajar duro todos los días, esforzarme al máximo y estar listo para poder entrar con los muchachos a la cancha», dijo Banchero en la noche de Draft.
Algunos aseguran que el joven jugador nacido en Seattle, Washington; no necesitó demasiada adaptación: aprende rápido y lo demostró desde el día cero. Agresivo, talentoso y trabajador, Orlando disfruta de un jugador de solo 19 años que ha superado las expectativas previas.
Los números de Paolo llaman la atención porque incluso están por encima de los de LeBron James en su carrera de novato en Cleveland Cavaliers. Superó en sus primeros seis juegos la frontera de los 20 puntos y es el tercer novato de Orlando en conseguir algo así, desde que lo lograron Penny Hardaway y Shaquille O’Neal.
El equipo de Jamahl Mosley seguramente no alcance los playoffs en esta temporada, pero tiene una armada joven y talentosa que puede dar el campanazo de aquí a pocos años. Banchero tiene 19 años, Franz Wagner 21 y Jalen Suggs 21, entre otras estrellas en pleno crecimiento.
«Significa mucho, supongo. Obviamente me hubiese gustado ganar, pero quería jugar duro, para el equipo, y eso pasó. Es una bendición», dijo Banchero luego de su debut en la NBA, tras sus 25 puntos, cinco rebotes y cinco asistencias, planilla que no se veía desde LeBron en 2003.
SUS RAÍCES ITALIANAS Y SU PASADO EN EL FÚTBOL AMERICANO
Los abuelos de Paolo, por parte de su padre, vinieron desde el norte de Italia en los primeros años del siglo pasado y se radicaron en Estados Unidos. Eso hizo que Banchero tenga doble nacionalidad: es estadounidense e italiano. «Cuando tenía 16 años, la selección italiana se acercó a mi papá.
Dijeron: ¿Tiene raíces italianas? ¿Puede obtener la ciudadanía? Y mi papá les dijo que sí. Entonces comenzó todo el proceso, volé a San Francisco varias veces para reunirme con ellos en la embajada italiana y así obtuve mi pasaporte», dijo. «La cantidad de amor que recibo en Italia es una locura y seguiré jugando para ellos», agregó.
Banchero tuvo que elegir entre el fútbol americano y el básquetbol en los primeros años de la adolescencia. Era, lo que se dice, un quarterback prodigio, con un brazo envidiable. Llegó a ser una de las máximas promesas del fútbol americano en Washington, pero se decidió por el básquetbol.
«Si se hubiese quedado en el fútbol americano, hubiese sido uno de los mejores reclutados del país. Con ese físico considero que hubiese jugado al siguiente nivel», dice Monte Kohler, leyenda de la comunidad del fútbol americano en Washington, ganador de cuatro campeonatos estatales y entrenador de O’Dea High School desde 1985.
