Es la décima Copa del Mundo que llega a Sudamérica, tras las cinco ganadas por Brasil, las dos de Uruguay y las tres que ahora colecciona Argentina.
Argentina ganó la final del mundo por penaltis en un partido de infarto, sumamente emocionante. Hay quienes reseñan podría tratarse de una de las mejores finales de la historia.
El primer gol del encuentro fue marcado por Lionel Messi después de cobrar un penal tras una falta cometida en el área a Ángel Di María. Con un marcador 2-0, el segundo de Argentina lo protagonizó Di María, pero Kylian Mbappé empató el partido con dos goles seguidos (uno de penal) que le dieron la vuelta al partido en un solo minuto fatídico. En el segundo tiempo añadido, Messi metió un gol agónico. Y poco después, Mbappé volvió a anotar. Fue 3-3 en el tiempo global y a penaltis. Los goleadores del Mundial dejaron su marca en los 120 minutos. Un juego de infarto que se fue a la tanda de cobros desde el punto blanco.En los penales, Argentina ganó 4-2. Montiel marcó el último cobro.
La historica hazaña establece un nuevo récord de penales otorgados a una selección en un mismo torneo.