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Una necesidad provoca un movimiento

La historia de este día nos habla de Isaac que significa “risa”, la tierra estaba viviendo una temporada de crisis, miseria y gran necesidad (Génesis 26:1) lo que causó que este hombre se moviera a la tierra de Gerar para allí ratificar un juramento que Dios le había hecho a su padre Abraham.

Estando en aquella tierra sembró y cosechó al ciento por uno de tal manera que fue prosperado hasta enriquecerse y hacerse más poderoso que los habitantes de Gerar, toda esta bendición provocó envidia ante sus vecinos, entonces se movió hacia el valle de Gerar, sin ninguna fuente de agua en aquel lugar tuvo que recurrir a unos pozos que había construido su padre pero que los filisteos lo habían cegado con tierra, aquí entonces inicia un proceso donde Isaac tiene que guerrear para mantener lo que había trabajo.

Durante este tiempo empezó a cavar los siguientes pozos:

-Esek: significa contienda, aquí tuvo que contender con que aquellos pastores de Gerar. Este es lugar donde seremos capacitados para aprender a liberar nuestras batallas, siempre que intentemos buscar la presencia de Dios la oposición se va a manifestar.

-Sitna: significa enemistad, aquí también riñeron los pastores por el pozo. Este lugar va determinar nuestra persistencia hasta encontrar la presencia, no todos estarán de acuerdo con tu visión, algunos serán llamados tus enemigos a causa de lo que portas, tal pasó con José que hasta los de casa lo vendieron por un sueño que llevaba dentro.

-Rehabot: significa amplitud, prosperado. En este lugar ha determinado el tiempo de la cosecha donde Jehová nos ha prosperado y nos ha permitido fructificar en la tierra.

-Seba: significa juramento. En este lugar la presencia de Dios es ratificada, es lugar de conexión directa con el padre, en este pozo Isaac encontró agua, sin agua no podía sostener todos los animales y los cultivos que tenía, así mismo nosotros sin la presencia no podemos sostener las bendiciones que Dios nos ha entregado.

Es casi seguro que toda persona determinada que persiste tendrá victoria o alcanzará las metas que se propone es una fórmula que no falla, pero hay una plena seguridad de que aquellos que lo hacen sin Dios su victoria será efímera, mas aquellos que se han entregado directamente al padre su victoria va a permanecer.

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