Estados Unidos. El proceso de desdolarización se amplía y “las señales de esto están en todas partes”, destacó en un artículo para RT la Dra. Radhika Desai, profesora del Departamento de Estudios Políticos en la Universidad de Manitoba, en Canadá.
La también directora del Grupo de Investigación sobre Economía Geopolítica reiteró que nuevas fuentes de finanzas en monedas distintas al dólar están surgiendo, poniendo como ejemplo que “los mayores compradores y vendedores en el comercio del petróleo –tanto Moscú y Riad como Pekín y Nueva Delhi– acuerdan comerciarlo en monedas distintas al dólar”.
La experta señaló que el importante papel de la moneda estadounidense en el mundo se ha basado desde 1971 en la afirmación de que “el denominado sistema financiero en dólares era el más sofisticado del mundo, con las fuentes más amplias y más profundas de capital, de las que los inversores del resto del mundo podrían beber hasta saciarse”. En ese contexto, destacó también el papel crucial del proceso de la financiarización o la expansión de actividad financiera.
Sin embargo, Radhika Desai indicó que las afirmaciones sobre el atractivo del sistema financiero estadounidense eran exageradas. Indicó que el sistema no logró proporcionar “una inversión productiva beneficiosa”, sino que “liberó torrentes de dinero caliente de largo plazo que solo han beneficiado principalmente a inversores especulativos occidentales, mientras causaban regularmente estragos en el resto de economías mundiales”.
Contradicciones internas del sistema
En ese contexto, la profesora hizo hincapié en que el sistema en dólares deja de “proporcionar oportunidades para el beneficio especulativo” a sus inversores de corto plazo de EE.UU. y Occidente, y sus contradicciones internas están aumentando.
Entre estas contradicciones se encuentra el aumento de la inflación y las acciones de la Reserva Federal al respecto. Por un lado, se puede frenar la inflación a través del aumento de la tasa de interés, pero esta medida puede arruinar “las estructuras financieras de la deuda improductiva y la especulación en la que se basa la riqueza de la élite financiera a la que sirve”. Al mismo tiempo, la negativa a aumentar la tasa de interés provocará que la inflación siga creciendo y “destruirá el mismo sistema aun más directamente, socavando el valor” del dólar, la moneda en la que este sistema se basa. “¿Cuál es el sentido de acumular su riqueza en dólares si están perdiendo valor a un ritmo cercano o incluso superior al ritmo en el que usted los está acumulando?”, preguntó Radhika Desai.
La experta señaló que, en las últimas décadas, el proceso de financiarización “estranguló la fuente alternativa de lucro”, es decir “la economía productiva de EE.UU.”, que se quedó sin inversiones a largo plazo. “Por eso, hoy, ni el sistema financiero ni la economía productiva de EE.UU. mantendrán el flujo de dólares en el sistema de dólares de EE.UU.”, indicó.
China se hace más atractiva
En medio de esta situación, la economía china luce más atractiva para los inversores, señaló la autora del artículo, agregando que “el dinero de todo el mundo está acudiendo en masa” a las ofertas públicas de venta de empresas del gigante asiático.
La autora del artículo explicó que la razón de esta tendencia consiste en que “China todavía tiene una economía productiva”, así como “las compañías productivas que pagan dividendos constantes”.