VILLA ALTAGRACIA. – El Juzgado de la Instrucción de esa demarcación confirmó la prisión preventiva a tres agentes policiales acusados por el Ministerio Público de la muerte de una pareja de religiosos que se desplazaba en un automóvil por la autopista Duarte la noche del 30 de marzo de este año.
Durante la revisión obligatoria de la medida, la jueza Sudelgi Rosario Mena ratificó la coerción a Norquis Rodríguez Jiménez (cabo), Victorino Reyes Navarro (segundo teniente) y a Anthony Castro Pérez (raso), quienes cumplen un año de prisión preventiva por la muerte a tiros de la pareja de esposos Elisa Muñoz Marte y Joel Eusebio Díaz Ferrer, de 32 y 35 años de edad.
Rodríguez Jiménez y Reyes Navarro cumplen la medida en el Centro de Operaciones Especiales, de Manoguayabo, en Santo Domingo Oeste, en tanto que Castro Pérez en el Centro de Corrección y Rehabilitación El Pinito, de La Vega.
El tribunal acogió la petición del Ministerio Público, representado por el fiscal de Villa Altagracia Antonio Tejada Reyes, quien demostró que persiste el peligro de fuga y que la medida más idónea en este caso es la prisión preventiva que le fue impuesta en abril pasado.
En el transcurso de las investigaciones, la Fiscalía de Villa Altagracia, encabezada por la titular Fátima Sánchez Guzmán, ha obtenido suficientes evidencias que les vinculan al condenable hecho.
El Ministerio Público recordó que por este caso también es procesado el coronel policial César Maríñez Lora, superior jerárquico de la patrulla que protagonizó el hecho.
También, Domingo Perdomo Reyes (sargento), Ángel De Los Santos (cabo) y Juan Samuel Ogando Solís, Emil Alexander Rincón Martes y Guillermo Rosario Melo (rasos).
En el hecho en el que murió la pareja, también resultó herido Claudio Ramírez Lamais, de 29 años. Los tres se desplazaban, junto a Carlos José Pérez Báez, quien resultó ileso, en un automóvil marca Kia, modelo K5, color blanco, cuando fueron interceptados por la patrulla, que la emprendió a disparos contra el vehículo.
El grupo retornaba a Santo Domingo luego de participar en un culto religioso en Villa Altagracia.