Por Manuel Quiterio Cedeño; En 1963 República Dominicana estaba iniciando con muchas limitaciones una nueva etapa y hacia los primeros intentos para dejar atrás el largo episodio de la criminal y sangrienta dictadura encabeza por Rafael Trujillo, sustentada con la complicidad de familias y personajes que se cobijaron a la sombra de ese poder funesto, como Joaquín Balaguer y otros títeres y adulones por el estilo.
La sociedad hacia tímidos asomos de organización y creación de instituciones para y promover la participación colectiva en la conducción del país. Comenzaron a surgir partidos, sindicatos y otras organizaciones representativas de sectores sociales.
Una de ellas fue la Asociación de Hoteles y Restaurantes (ASONAHORES), de limitada membresía, creada por visionarios que representaban el peque núcleo de hoteles y restaurantes que existían en la capital del país, en que se destacaban los hoteles Jaragua, El Embajador, El Comercial y unos pocos más, a los que se sumaban una docena de restaurantes ubicado en la exclusiva lista de establecimiento de la ciudad como el Lina, Vesubio y otros, la mayoría de ellos desaparecidos hace años.
ASONAHORES cumple 60 años. Quienes la crearon con una gran visión de futuro, ya desaparecieron al igual que la mayoría de las empresas que representaban. Pero en los años setenta Joaquín Balaguer aceptó el consejo de importantes organismos internacionales, entre ellos el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial, y abrió un espacio al desarrollo del turismo.
En mayo de 1966 se creó la tarjeta de turismo, para que quienes visitan el país no tuvieran que solicitar visa, en 1969 se aprobó la ley de aeronáutica civil; en diciembre de 1969 se aprobó la Ley Orgánica de Turismo; en 1971 se aprobó la primera versión de la ley No. 153 de incentivos a la inversión en turismo. En 1979 se aprobó la ley que crea el Ministerio de Turismo.
Es extensa la colección de leyes, decretos y disposiciones del período 1971-2021 aprobadas para impulsar el desarrollo del turismo, que según el Banco Central es hoy uno de los principales motores del desarrollo y sustento de la economía.
Ayer se celebró el 60 aniversario de la que hoy es Asociación de Hoteles y Turismo de la República Dominicana, que mantiene sus siglas originales de 1963: ASONAHORES. Esta institución ha sido la contraparte del Ministerio de Turismo y las demás instituciones del Estado involucradas en la actividad turística.
En octubre 1988, cuando fui invitado a vincularme a ella, ASONAHORES era un pequeño núcleo de hoteles y restaurantes de Santo Domingo. Comenzaba el empuje del turismo, pero paso a paso asumió el liderazgo del sector y se convirtió en contrapeso del Estado, guiada por Pedro Garrido, su director ejecutivo, con apoyo de la nueva camada de empresarios turísticos, entre ellos Frank Rainieri, Rafael Blanco Canto, Luis Lopez, Johnny Bernal y otros.
ASONAHORES ha contribuido a que la sociedad asuma el turismo como oportunidad de desarrollo, y en la crisis más recientes, 2020-2022, ha sido la contraparte del Gobierno en el diseño del camino al éxito, y mostrado el valor de una asociación público-privada.
