TAMPA, Florida, EE.UU. (AP) — Tom Brady está de regreso para su 23ra temporada y tercera con los Buccaneers de Tampa Bay.
Pero eso difícilmente es la única noticia al inicio del campamento de prácticas de los campeones de la División Sur de la Conferencia Nacional.
Todd Bowles comienza su segunda etapa como entrenador en jefe y los Bucs han incorporado talento reconocido en su ofensiva para ayudar a que Brady consiga su octavo título de Super Bowl.
Un ejemplo fue observable el miércoles, con la llegada del receptor Julio Jones, siete veces elegido al Pro Bowl.
Brady, quien cumplirá 45 años, lideró la NFL en yardas por aire y touchdowns la temporada pasada y mencionó que tenía “asuntos pendientes” a la hora de justificar su decisión de regresar tras su breve retiro que anunció el febrero.
Pero los Bucs sí tendrán que lidiar con otro retiro: el del tight end Rob Gronkowski, quien anunció que nuevamente se haría a un lado en junio. El equipo firmó al veterano Kyle Rudolph para reemplazarlo.
“Tenemos que reemplazar las atrapadas de Gronk. Tenemos un arma extra, especialmente en la zona de anotación y en el campo, y lo utilizaremos”, indicó Bowles en referencia a Jones.
Jones disputó 10 temporadas con los Falcons de Atlanta, sus rivales en el Sur de la Conferencia Nacional, antes de que quedara fuera por varias lesiones. Disputó apenas siete encuentros en dos campañas, lo que incidió en las peores estadísticas de su carrera, el año pasado con los Titans de Tennessee (31 recepciones para 434 yardas y un touchdown en 10 encuentros).
Los Titans dejaron ir al receptor de 33 años, quien suma 879 atrapadas para 13.330 yardas y 61 touchdowns en 11 temporadas.
“Veo hacia el futuro y no para atrás”, indicó Jones. “Ésta es una gran oportunidad de ser parte de algo muy especial”.
Los Bucs eran el primer equipo en la lista de Jones. La oportunidad de jugar junto a Brady y pelear por un anillo de Super Bowl era demasiado buena para dejarla ir.
Bowles será el responsable de unir al equipo. Reemplazó a Bruce Arians, quien anunció su retiro en marzo, poco después de que Brady pusiera fin a su retiro de seis semanas.
Pero Bowles ha sido parte de los Bucs desde el 2019, cuando se convirtió en el coordinador ofensivo. Antes terminó con marca de 24-40 en cuatro años al frente de los Jets de Nueva York, de 2015 a 2018.
Bowles, de 58 años, disputó ocho temporadas en la NFL y bromeó el miércoles al decir que los reporteros “posiblemente tendrían que quedarse 24 horas” si quisieran conocer los detalles de la diferencia de estar al frente ahora de los Bucs y no de los Jets hace siete años.