El presidente de la Asociación Dominicana de Transportistas Turísticos (Adotratur), Cipriano Bencosme, dijo mediante un comunicado que las empresas que forman parte del sector, deben a sus acreedores un monto por el orden RD$ 1,338,721,570 y que no han podido pagar por la crisis generada en el país por el coronavirus.
“La deuda consolidada de 26 de nuestros miembros asciende en la actualidad a esa suma. Esas deudas tienen en garantía las unidades de transporte.
Dicho esto, solicitamos al presidente de la República, Luís Abinader, su intervención para poder detener estas presiones de nuestros acreedores y buscar alternativas que nos permitan nuestro parque vehicular en espera de la reactivación del turismo”, destacó Bencosme Asimismo, sostuvo que de los 2,500 empleados con los que cuenta, 2,402 de ellos están suspendidos y 76 cancelados, además.
Afirmó que ese sector se ha quedado sin liquidez y que no tienen recursos para cumplir sus compromisos, reactivar sus servicios, ni liquidar a sus empleados, por lo que explica que están en la quiebra.
Precisó que dada la suspensión de la actividad turística en el país, en marzo y la muy lenta recuperación, que a su juicio se ha experimentado en los últimos meses, las compañías del transporte turístico han sido duramente impactadas en sus finanzas.
“Actualmente, llevamos aproximadamente seis meses sin operación, con nuestro personal y las unidades sin uso. Pero además, se suma el hecho, de que a pesar que no estamos operando, nuestros acreedores nos presionan para saldar las deudas contraídas e incluso nos han incautado muchas de nuestras unidades.
Nos hemos quedad sin liquidez, pues no tenemos recursos”, destacó Bencosme. El titular de Adotratur aseguró que el mayor problema de los transportistas turísticos es que no pueden cumplir con los pagos a los bancos, pese a que algunos han hecho flexibilizaciones, pero no hay ingresos para abonar al capital, ni pagar los intereses.
La entidad respalda las medidas dispuestas por el gobierno para la reactivación del turismo, pero aclaró que sus autobuses no se movilizan con turistas locales, sino con los viajeros internacionales.
