Bávaro Punta Cana.- El jefe de seguridad del presidente Jovenel Moïse, asesinado hace una semana por un grupo de hombres armados en un ataque que ha sacudido fuertemente a la nación, ha sido puesto bajo custodia policial este jueves.
La detención del jefe de seguridad del palacio presidencial, Dimitri Hérard, ha sido confirmado por Marie Michelle Verrier, una de las portavoces de la Policía Nacional de Haití.
Hérard es uno de los 4 miembros del cuerpo de seguridad personal del presidente, quien no acudió este pasado miércoles al tribunal para responder a las preguntas de la fiscalía sobre el asesinato del presidente Moïse.
El fiscal Bed-Ford Claude, que lleva el caso de magnicidio, había convocado a Hérard la mañana de ayer para que respondiera a ciertas preguntas acerca del asesinato del presidente, pero el responsable de seguridad no apareció en el Palacio de Justicia de Puerto Príncipe.
Este justificó su ausencia en una carta enviada a la fiscalía alegando que la Inspección General de la Policía le había aplicado una medida cautelar que le impedía acudir a la citación.
Antes que Hérard, otros dos responsables de la seguridad del mandatario faltaron a su cita con la fiscalía: el inspector Amazan Paul Eddy, encargado del CAT Team, y el comisario Jean Laguel, coordinador general de la seguridad presidencial, que se excusaron con los mismos argumentos.
La detención de Dimitri Hérard se produce después de que se hayan planteado preguntas dentro de la investigación sobre la respuesta de los guardias de seguridad del palacio presidencial después de que dos docenas de mercenarios armados irrumpieran en la casa del presidente en varios vehículos y entraran en la residencia para abrir fuego, tras haber encontrado poca resistencia.
Además, Hérard había hecho varios viajes a Ecuador, Panamá y República Dominicana como tránsito hacia Colombia, país de procedencia de 26 supuestos mercenarios presuntamente involucrados en el magnicidio.
Según ha comparecido este jueves el presidente de Colombia, Iván Duque, muchos de los exsoldados colombianos acusados de participar en el asesinato del presidente Jovenel Moïse habían ido a Haití para trabajar como guardaespaldas, pero otros sabían que se estaba planeando un crimen.
(Fuente Externa)