Bávaro, Punta Cana.- El Centro de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) Higüey, no ha dejado de impartir la docencia. Se ha mantenido impartiendo clases virtuales a sus alumnos.
Este ha sido un proceso bastante enriquecedor y que ha servido de experiencia a la casa de altos estudios, pues era un reclamo que le estaban planteando y sugiriendo diferentes sectores del país para que la UASD, como universidad estatal, entrara en la modernidad de la educación bajo la Modalidad Virtual. La pandemia brindó este escenario, aunque parezca paradójico, para que la UASD comenzar este proceso.
Los estudiantes del centro UASD- Higüey, han estado beneficiándose de la plataforma cibernética de la casa de estudio para recibir la docencia de forma virtual y únicamente un 1% no han aceptado esta modalidad de estudio. El parque ubicado en el centro UASD-Higüey, tiene wi-fi al alcance de todos. Muchos estudiantes también lo hacen desde sus hogares.
Se destaca la labor que hace el director del centro UASD-Higüey, ingeniero Henry Castillo, quién está transformando la casa de estudio. El ingeniero Henry Castillo ha hecho transformaciones que redundan en beneficio del centro educativo. Ha adquirido equipos relevantes para la ejecución de las clases pues todas las aulas tienen aire acondicionado. También tienen internet totalmente gratis. Recientemente adquirió un autobús con recursos generados por el Centro de Higüey.
Explica Henry Castillo, que el departamento académico y de evaluación se encuentra en la fase final de reporte de exámenes y calificaciones y están enfocados en el curso de verano. El curso se dará vía virtual. Los estudiantes podrán tomar dos asignaturas con máximo de 9 créditos. Informa que todavía no tiene información si el próximo semestre será semipresencial ya que eso dependerá del índice de contagio del Covid.
Manifiesta, que como docente a él no le ha satisfecho la experiencia de la modalidad virtual.»Yo entiendo qué es lo que mejor pudimos hacer en el momento adecuado, pues de lo contrario hubiésemos perdido dos semestres. Yo veo la tecnología como un medio, no un fin y no hay nada que sustituya al contacto personal».
Explica el ingeniero que no existe tecnología alguna que sustituya el contacto que tenemos que tener los seres humanos. «El país no está preparado para la tecnología virtual, pues un estudiante con un paquetito de datos no puede realmente tener una satisfactoria experiencia de estudios. Entiendo que fue la opción que tuvimos y que hicimos un gran logro. Esta nueva modalidad podría servirnos de soporte para muchos asignaturas, donde un profesor se enferme o esté ubicado en otro país», expone. Manifiesta que lo ve como un elemento alternativo, pues no cubre el 100% de los objetivos que se pueden dar en las clases presenciales, por las mismas limitaciones que tienen los estudiantes y la plataforma.
Informa que la deserción debido a la modalidad virtual en UASD-Higüey fue mínima. «Esa deserción se observó en las provincias que tienen menores recursos y los estudiantes no tienen acceso a internet. Hubo una deserción significativa de un 30 a 35% en la Región Sur, en Barahona, Pedernales y aquí en el este la que se vio más afectada fue Hato Mayor, pero La Altagracia no fue en absoluto significativa», concluyó el ingeniero.
