Verón. Son muchos los reductores de velocidad, comúnmente llamados policías acostados, que están a largo de la carretera Verón-Punta Cana sin pintura, que pueda servir de señal a los conductores que uno de ellos está cerca.
Además, que no tienen pintura, como una forma de aviso, están en un muy mala condiciones. Muchos de estos reductores en puntos muy estratégicos de la referida vía.
El más deteriorado es el que está justo frente la Escuela Verón 1 y la Unidad de Atención Primaria. Los otros se sitúan frente al Cuartel de la Policía Nacional y Los Manantiales.
Los policías acostados en malas condiciones representan un verdadero riesgo para los conductores, que a diario transitan por la carretera Verón-Punta Cana, pues al no percatarse de que un reductor está cerca, por la falta de pintura, se podría ocasionar un fatal accidente.
En las comunidades de Verón, también es común que existan muchos policías acostados sin estar autorizados por la Junta Municipal y que cumplan con los parámetros establecidos por la ley que regula el tránsito y el transporte terrestre.