VERÓN-PUNTA CANA. El hidrosalpinx es una alteración de la trompa de Falopio caracterizada por la obstrucción y acumulación de líquido en su extremo, que hace que la trompa se dilate y se distienda, complicando e incluso impidiendo su correcta función.
La principal causa es la enfermedad pélvica Inflamatoria, originada habitualmente por una infección de transmisión sexual que normalmente suele ser clamidia o gonorrea.
Según informa la gineco-obstetra Liz Pérez, una infección como estas que en ocasiones son mal tratadas o no diagnosticadas durante años puede provocar la inflamación crónica de la trompa, también conocida como salpingitis. Esta alteración favorece la liberación de mediadores proinflamatorios en la trompa de falopio y la acumulación de líquido en su interior.
Dentro de los factores de riesgo del hidrosalpinx está la endometriosis, alguna cirugía previa en las trompas o en algún otro órgano de la cavidad pélvica, la inserción del DIU como anticonceptivo, un embarazo ectópico previo y la tuberculosis tubárica.
Asimismo, Pérez explicó que esta enfermedad, además de la infertilidad puede ocasionar en la mujer un embarazo ectópico, es decir, fuera de la cavidad uterina.
El hecho de que una mujer pueda concebir luego de tener antecedentes de hidrosalpinx dependerá de si no está obstruida totalmente la trompa uterina, ya que si está en ese estado, se dificulta el embarazo de manera natural.
“Sin embargo, una paciente con antecedentes de hidrosalpinx tiene una mayor probabilidad de cursar con un Embarazo ectópico”, puntualizó la ginecóloga.
Como se identifica.
La especialista señaló que se puede diagnosticar por medio de sonografia transvaginal, laparoscopia y por histerosalpingografia, a través de esta técnica es posible observar la dilatación de las trompas y si hay obstrucción gracias a la utilización de rayos X. Aunque la detención con este método es un poco molesta para la mujer, pero no dolorosa.
Los síntomas incluyen en ocasiones dolor en la parte baja del vientre, que puede ser constante o agudizarse en ciertos momentos. Por otra parte, los hidrosalpinx más graves pueden ocasionar fiebre, malestar general y una secreción vaginal maloliente.
“Para establecer un tratamiento de hidrosalpinx, habrá que tener en cuenta el origen, el tiempo de evolución y si existe deseo de ser madre o se puede iniciar antibioterapia recomendada por su ginecólogo”, recomendó Pérez.
Mientras que si luego de llevar el tratamiento antes mencionado, el hidrosalpinx no desaparece, el tratamiento a seguir será quirúrgico.