Bávaro, Punta Cana.- Santiago Matias denunció haber recibido amenazas luego de entrevistar a Bonny Cepeda, el músico que cantó en el cumpleaños de Nicolás Maduro y recibió 60 mil dólares. El artista, quien además es el viceministro de Cultura de República Dominicana, confesó durante el reportaje haber cobrado la extravagante suma, mientras que el sueldo mínimo en Venezuela no supera los 2 dólares mensuales.
«Temo por mi vida”, escribió en Twitter el comunicador. “Estoy recibiendo llamadas anónimas amenazándome luego de la entrevista”.
Alofoke también compartió en la red social un mensaje que recibió por WhatsApp. “Mira maldito negro hijo de $#@*», negro marginal dominicano, la madre tuya es la w es asesina”, decía uno de los mensajes. Mientras que en el otro se leyó de nuevo: “Maldito negro hijo de puta”.
Poco después, dijo, las amenazas comenzaron también en Twitter.
La oposición de Venezuela que lidera Juan Guaidó denunció este miércoles que el dictador Nicolás Maduro pagó 60.000 dólares al cantante dominicano Bonny Cepeda por su actuación en el 58 cumpleaños del tirano, el pasado 23 de noviembre.
El rechazo de la oposición se produjo después de que el propio Cepeda revelara el dato durante una entrevista en el programa Alofoke Radio Show en su país.
En este sentido, el representante de Guaidó en Colombia, Tomás Guanipa, deploró que “mientras los venezolanos mueren de hambre y por el colapso del sistema hospitalario”, Maduro pague “miles de dólares para contratar a un cantante de salsa” para celebrar su cumpleaños.
“El desprecio de Maduro y su cúpula es cada día más dantesco. Mientras un venezolano gana menos de un dólar al mes, Maduro le paga 60.000 dólares a un cantante para que venga al país y le cante en su cumpleaños”, denunció Guanipa.
La fiesta de cumpleaños de Maduro fue ampliamente criticada en Venezuela por traer al país a varios artistas extranjeros -entre ellos, Cepeda- en plena pandemia, aún cuando las fronteras estaban muy restringidas para el resto de ciudadanos.
Las críticas se produjeron también por el “derroche” televisado de Maduro, que cantó y bailó junto a varios familiares, amigos y miembros del régimen socialista, con los que compartió una gran torta de cumpleaños con los colores de la bandera de Venezuela.