Punta Cana. – En la recta final de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, el resto del mundo aguarda pacientemente los resultados de dicha contienda electoral.
América Latina es una de las regiones que podría marcarse como la más interesada, por lo que representa la políticia estadounidense para sus naciones.
El republicano Donald Trump, actual mandatario de Norteamérica y aspirante a otro nuevo periodo de gobierno, en un principio se mostró reticente sobre la presencia de latinos en Estados Unidos. Sin embargo, previo a las elecciones prometía la generación de dos millones de empleos para la comunidad latina, algo que no contrasta con las políticas desarrolladas durante sus primeros cuatro años como presidente.
Países como Venezuela, México, Cuba y de Centroamérica por ejemplo, han sido algunos de los afectados económicamente por las negativas de Trump, especialmente en el ámbito migratorio.
En el caso del demócrata Joe Bide, principal contrincante de Trump, sus propuestas para la región van desde la cooperación en aspectos necesarios para países de escasos recurso; el levantamiento de restricciones económicas; y hasta la protección de inmigrantes como los de Venezuela, quienes a la fecha sufren los efectos de una crisis socio política y económica que les ha obligado abandonar su país.
ECONOMÍA
En el aspecto meramente económico, Trump propone elevar los impuestos a las ganancias de las corporaciones beneficiadas con las medidas tributarias durante años anteriores en su gobierno, y por el contrario disminuirlos al salario de la seguridad social.
Biden busca aumentar los salarios y evitar recortes en la seguridad social; y al igual que Trump considera elevar los impuestos para recaudar capital.
Otro punto en común es que ambos consideran continuar las ayudas para seguir paleando la crisis que ha generado el coronavirus.