Bávaro. La cantidad de carriles improvisados que forman los conductores en los semáforos del Distrito Verón-Punta Cana, sigue siendo un motivo de preocupación para algunos residentes locales.
Muchos consideran que al formar otro carril, a los ya establecidos en la vía, saldrán más rápido del semáforo y por tanto creen que van en «ventaja».
Esta situación se está observando con más frecuencia en las intersecciones que existen en la demarcación turística, sobre todo en horas de mayor circulación vehicular, cuando de forma improvisada se crean hasta 4 carrilles.
Algunos conductores incluso casi rozan con los laterales de la vía y no dejan espacio a quienes tienen que cruzar.
Por ejemplo, en el semáforo de Coco Loco suele pasar que quienes vienen de Friusa y van hacia a Verón, se encuentran con una fila de vehículos que obstaculiza el tránsito en el cruce que dirige a la avenida Barceló.