Bávaro Punta Cana.- A hora y media de la iudad de Puerto Plata, específicamente en la comunidad El Castillo, del Municipio de Luperón, emerge uno de los centros de esparcimientos más idílicos de la región Norte, Fricolandia, un espacio con un encanto natural único.
Fricolandia está en la comunidad El Castillo, en La Isabela (la primera ciudad del Nuevo Mundo), Puerto Plata. Tomando la carretera Puerto Plata-Navarrete, se gira en Imbert, se pasa por Luperón y al llegar a la zona donde está el parque arqueológico de Villa Isabela, se gira hacia la derecha, hasta un punto donde una pared blanca y un caballito de mar te dan la señal de que has llegado a Fricolandia.
Este exquisito destino de ensueño, se presenta al mercado turístico con una propuesta diferente que le brinda al cliente la opción de elegir entre hacer una reserva por un precio módico que incluye el servicio de almuerzo y bebidas; o la posibilidad de llevar su refrigerio, a la vez que disfruta de todas las atracciones del lugar. Esto incluye agua y café y tienen bebidas a la venta en el bar. El almuerzo es tipo buffet y es la misma madre del propietario quien pone el toque de sazón ¡y qué sazón! También cuentan con un área de barbecue que los clientes pueden usar con reserva previa.
El innovador enclave cuenta con 32 bungalows o gazebos con capacidad para 20 personas, ubicados a orillas de una hermosa playa de suave oleaje y de vista paradisíaca, ideal para el disfrute de toda la familia.
Entre sus principales atracciones se encuentran los paseos en yate y jet ski. Además, posee una piscina, área de juegos para niños y un espacio para camping.
Según su propietario, Francisco Alberto Gómez, Fricolandía es un espacio turístico innovador, diseñado para que el cliente se sienta como en casa. Un paraíso terrenal que supone un privilegio para aquellos que lo visitan.
“Cada uno de nuestros espacios esta ideado desde mi óptica como turista, es decir, yo les ofrezco a mis visitantes las atenciones y servicios que yo exigiría en cualquier otro destino. Fricolandia es el rincón perfecto para conectarse con la naturaleza y alejarse de la civilización”, expresó Gómez.
“Fricolandia atesora un encanto natural de ensueño, un destino que ofrece una postal para la memoria de quienes nos visitan, además poseemos una decoración arquitectónica moderna y chic, razón por la cual muchos nos eligen como el centro para la realización de bodas, bautizos, cumpleaños, fiestas familiares y hasta empresariales”, argumentó el propietario del lugar.
Según testimonios de sus visitantes, Fricolandia es un lugar inolvidable que combina la belleza del mar con la naturaleza y brinda mucha paz y tranquilidad.
