Si bien Kyrie Irving fue fundamental en las Finales de 2016 en el primer título de la historia para Cleveland Cavaliers, el ahora jugador de los Brooklyn Nets ha ido un paso más allá y ha reconocido que siempre pensó que “era la mejor opción para sus equipos”, informa el medio SLAM.
“Es una cosa con la siempre me he sentido cómodo, ¿sabes? Siento que siempre fui la mejor opción en todos los equipos que jugué”, destacó Irving. “Pero esta es la primera vez en mi carrera en la que puedo mirar hacia abajo y ser como ese hijo de puta que puede hacer ese último lanzamiento”, agregó.
Irving compartió vestuario con el cuatro veces MVP, LeBron James; también en Boston Celtics con grandes jugadores como Gordon Hayward, Al Horford, Jayson Tatum o Jaylen Brown; y ahora en Brooklyn Nets donde se espera que forme un grandioso tándem con Kevin Durant, ambos recuperados de sus problemas físicos para el próximo curso 2020-21.
Davis y yo funcionamos porque no estamos celosos el uno del otro”
El propio LeBron ha reconocido que mantener su relación con Davis libre de cualquier tipo de celos o envidia ha sido la clave del éxito en su primer año juntos con la camiseta de los Lakers y sus declaraciones fueron justo después de las de su ex-compañero Irving.
“No sentimos ningún tipo de celos el uno del otro”, afirmó el cuatro veces MVP de la temporada según recoge el periodista Kyle Goon. “Eso es lo más importante. En el deporte profesional hay muchachos que unen sus fuerzas, dos machos alfa como los llaman, que han estado dominando en sus propios equipos. Cuando se juntan se habla de cuán dominantes pueden llegar a ser. Pero los celos pueden destrozar las cosas. Y eso es absolutamente contrario a como somos. Sabemos quiénes somos. Sabemos de qué se trata todo esto. Y queremos lo mejor todos los días, tanto dentro como fuera de la cancha, el uno para el otro. Y lo digo muy en serio.”