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¿Evasión o permisividad?

Verón. La colocación de vallas publicitarias de manera irregular en las calles y avenidas del Distrito Municipal Turístico Verón-Punta Cana, provincia La Altagracia, por falta de vigilancia y de imposición de multas, impide al gobierno municipal percibir importantes ingresos por esta vía.

Manuel Gómez, encargado de Letrería de la Junta Municipal Verón-Punta Cana, justifica la inacción de esa institución señalando que “este distrito es grande, a veces me instalan vallas de manera irregular. Las instalan los fines de semana y de noche. Al ser tan grande el distrito, si me están instalando una valla en Uvero Alto yo no me doy cuenta”.

La responsabilidad de que la publicidad en vías y carreteras sea regularizada es exclusiva del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), y de los ayuntamientos, por lo que es el gobierno local quien debe vigilar y contrarrestar esta irregularidad.

Gómez refiere que no tiene el monto exacto que deja de percibir la Junta Municipal por las vallas ilegales que son colocadas a diario en esta localidad, pero alega que en una semana llegan a desmontar entre 20 y 30 vallas puestas de forma irregular.

¿QUIÉN VIGILA?

Según el artículo 158 de la Ley No. 63-17, de Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial de la República Dominicana, las personas que coloquen letreros, carteles y otros medios de publicidad o propaganda en las vías públicas sin la autorización del Intrant o del ayuntamiento correspondiente, serán sancionadas con una multa de uno a tres salarios mínimos del que impere en el sector público centralizado.

Este artículo también precisa que el Intrant fijará las dimensiones máximas de los letreros y demás medios de propaganda, su distancia, y cualquier otra condición que considere conveniente. Además de que el Intrant o los ayuntamientos removerán de las vías públicas letreros, carteles y otros medios de propaganda colocados en contraposición de esta ley o sus reglamentos.

En esta localidad de Verón-Punta Cana, el departamento de Letrería hace operativos y las vallas que están colocadas de manera ilegal las cortan, las retiran y las guardan en un depósito, más no sancionan a quienes las colocaron. Ese departamento cuenta con dos supervisores, y además le colabora la Policía Municipal para la vigilancia de estas infracciones.

COSTOS DE LAS VALLAS

Colocar una valla publicitaria en las calles y avenidas de Verón-Punta Cana tiene costos diversos, esto dependiendo del tamaño, espacio, disponibilidad, iluminación, etc. El encargado del departamento de Letrería de esta zona, Manuel Gómez, refiere que “el precio por pie va desde 30 pesos hasta 110, que es el más costoso”.

Los precios de la publicidad que se coloca en letreros en las orillas de las carreteras dependerán de las dimensiones que tenga. Según Gómez el permiso para colocar una valla publicitaria en esta demarcación puede costar 50 mil pesos, 75 mil, hasta 100 mil pesos.

Cabe destacar que para instalar esas vallas publicitarias se paga un permiso al principio, pero anualmente deben pagar un costo extra, por continuar con el espacio. Gómez dice que el pago anual es de 25 0 30 mil pesos, según el tamaño de la valla. La publicidad más pequeña paga desde 3 a 10 mil pesos.

Gómez manifiesta que, entre el cruce de Verón y el cruce de Cabeza de Toro, en la avenida Barceló, hay un promedio de 20 vallas instaladas. Antes de la pandemia del covid-19, Gómez dice que la Junta Municipal percibía por cobro de publicidad en las vías de este distrito cerca de dos millones 700 mil pesos al año, por concepto de permisología.

PROCESO PARA EL PERMISO

El proceso para colocar un letrero en esta localidad consiste, según el departamento de Letrería de la Junta Municipal, en hacer una solicitud del permiso dirigida a la oficina Técnica de Planeamiento Urano de Verón, anexada al departamento de Letrería, pues “Letrearía trabaja en conjunto con Planeamiento Urbano”.

Cuando se hace la solicitud, el departamento de Planeamiento Urbano, hace la inspección y si no hay ningún problema y es en un área pública se le otorga el permiso, pero si es en una zona privada, debe tener el permiso del propietario.

Según Gómez los letreros colocados en el Bulevar Turístico del Este y la Autovía del Coral son regularizados por el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), por lo que para ellos aprobarlos deben tener una carta de no objeción del Intrant, una vez tienen ese documento ellos hacen la inspección y proceden a dar la permisología.

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