VERÓN, PUNTA CANA. El blanqueamiento íntimo, más conocido como “blanqueamiento vaginal”, es la decoloración de la pigmentación oscura de la piel alrededor de la zona anal y de los genitales externos con fines estéticos.
Este procedimiento puede efectuarse tanto en hombres como en mujeres. Para muchas personas blanquear su zona intima es de vital importancia, ya que para muchas mujeres tener esta zona del cuerpo con un color más oscuro les resulta menos agradable a la vista en las relaciones sexuales o cuando se miran en el día a día y prefieren utilizar diferentes métodos para blanquearla.
El ginecólogo-obstetra, Edward Alejando Feliz Abreu, explicó que conforme pasan los años el área genital se va oscureciendo de forma rápida y con mayor intensidad en el embarazo, dejando como resultado que la zona quede más oscura que antes. Cuando se realiza el blanqueamiento, las zonas íntimas que se trabajan son los labios de la vulva, la ingle y región peri-anal.
Los beneficios que ofrece este procedimiento: primero es devolver el color que antes la persona tenía en esa área, además de que luego del proceso se tendrá firmeza en la piel.
Sin embargo, según asegura Abreu a pesar de que es difícil que la persona tenga complicaciones luego del blanqueamiento, puede darse el caso de tener alteraciones en la piel que es muy delgada o frágil, de igual forma, pueden presentarse problemas de cicatrización en algunos de los pacientes, por esa razón dice que se deben evaluar con cuidado para evitar cicatrices.
“No se puede realizar en pacientes embarazadas y personas con enfermedades de piel como falta de colágeno o piel muy frágil, o personas que hagan queloides”, aclaró el ginecólogo.
Es importante señalar que cada mujer que desee pasar por dicho proceso, debe hacerse una prueba de embarazo. Mientras que los requerimientos a llevar luego del proceso son, estar fuera del sol los primeros tres o cuatro días, especialmente si este se hace en el rostro o cuello.
Por otra parte, el doctor exteriorizó, que los resultados normalmente se visualizan de dos a tres semanas. Asimismo, aclaró que para conseguir un resultado satisfactorio se necesita un mínimo de dos o tres sesiones para lograr la adecuada estimulación de la piel. Abreu recomendó repetirse al menos una sesión anual para mantener la piel impecable.
